Os estáis planteando ser donantes de óvulos pero tenéis dudas?
¿Tienes miedo de que se te cuestione y juzgue? ¿Piensas en qué puede afectar a tu vida? Conoce lo importante de tu gesto.
Conocemos todo tipo de donantes de órganos, ser donante de sangre, de médula, de órganos, de cualquier parte de tu cuerpo ayuda a dar vida, ayuda a que personas que no tienen un pronóstico de vida largo, puedan seguir viviendo y disfrutando de una vida gracias a ti, a ese gesto de generosidad.
Desde hace años nuestra sociedad está concienciada y solidarizada con la donación, a través de medios de comunicación e incluso de redes sociales recibimos mensajes constantes en los que se solicitan donantes de un tipo de sangre determinada. Estamos acostumbrados y muy pocos son los que jamás han pasado por la camilla para “dar vida”.
Pero, ¿qué pasa con la donación de óvulos? ¿Has pensado en ser donante? ¿Sabes lo que eso significa para nosotras?
Primero, te diremos que el camino por el que pasa la mujer o pareja que necesita recurrir a la donación de óvulos, no es un camino fácil, todo lo contrario, es una lucha larga y dura, física y emocionalmente, en pos de conseguir un sueño, ser madre.
Todo empieza cuando el instinto maternal se despierta y llama a tu puerta, la mayoría de casos son parejas, que tras llevar tiempo intentando quedarse embarazados y tras muchos intentos fallidos, deciden ir al especialista y antes de saber que no van a poder ser madres con sus propios óvulos han recorrido un calvario de pruebas, tratamientos fallidos, fecundaciones invitro etc. Un camino que termina dejándote rota por dentro, tu sueño se desmorona, te sientes culpable e impotente.
Han derramado millones de lagrimas, lágrimas de pena, dolor y sufrimiento. Lágrimas de rabia e impotencia. Han caído al suelo un buen puñado de veces. Con cada negativo, con cada mala noticia, con cada ilusión truncada. Se les ha roto el corazón en pedazos. Su vida se paralizó hace ya mucho tiempo.
No viven, tan solo sobreviven. Y ahora se vuelven a poner de pie como tantas veces han hecho, ahora han decidido acudir a una de sus últimas opciones: la donación.
No es una decisión fácil de tomar, hay muchas parejas que se quedan en el camino. Todos esperamos que nuestro hijo tenga algo de nosotros, los ojos, la nariz, la boca, la sonrisa, pero, al final, pueden más las ganas de ser madre que una cadena genética. Tampoco es fácil decidir si vas a contárselo a la gente de tu entorno, a tu propia familia, te da miedo el rechazo, que piensen que no va a ser tu hijo, ¡¡¡¡que tontería, claro que es tu hijo!!!!!! pero sí, lo llegas a pensar.
Como ves, no ha sido un camino fácil. Antes de llegar a esa decisión, han tenido muchas conversaciones, la mayoría en privado, solos, incomprendidos y ocultos tras la barrera del desconocimiento de la sociedad que juzga y daña constantemente, porque no saben, porque se atreven a hablar sin haber pasado ni andado su duro camino, y sobretodo, han pasado un duelo, el genético.
Y apareces tú, donante de óvulos, algo que, probablemente como la mayoría, estés haciendo por dinero, sin pensar más allá de lo que significa. Precisamente por eso, porque ni siquiera te han contado lo que vivimos, sufrimos las portadoras de esos óvulos, no puedes llegar a imaginar la importancia de tu gesto, lo hagas por el motivo que sea. No podemos dejar de sentirnos agradecidas por tener la oportunidad de volver a sonreír, de sentirnos completas, de ser madres, gracias a ti, que has aportado ese granito de arena para que eso sea posible.
Un grano de arena enorme.
Siempre te estaremos agradecidos por todo eso que sin saber nos has dado. Porque seguro que cuando te planteaste ser donante no sabías la felicidad que podrías llegar a regalar, el amor tan grande que nació de tu altruismo.
Por eso a ti hoy quiero darte una y mil veces las gracias por tu gran regalo.
GRACIAS
Red nacional de infértiles
La asociación Red Nacional de Infértiles se creó para dar apoyo a todas las personas que están en estos momentos luchando por tener un bebé. Cuando la palabra infertilidad se cruza en tu vida todo tu mundo se paraliza. Comienza una etapa de stand by en la que se necesita una mano que te sujete, unos brazos que te reconforten.
Además, nuestro objetivo es darle voz a la infertilidad. Que se conozca la enfermedad, lo que es, lo que se vive, lo que se sufre.
Si quieres ayudarnos en nuestra lucha, ¡únete a nosotras y asóciate!