Cuando hablamos de infertilidad nuestros pensamientos tienen una connotación negativa, triste y dolorosa. La infertilidad hace desdichados a todos aquellos que desean ser padres con todo su ser, impotentes ya que no está en su mano el serlo e incomprendidos porque hoy por hoy aún hay mucho desconocimiento en la sociedad sobre el tema que suele cuestionar y criticar a las personas que deciden realizar todo lo que esté en su mano para lograr su máximo sueño. Triste pero así somos los humanos, capaces de hablar y cuestionar lo que desconocemos.
Pero hoy no quiero hablar de esa parte negativa que ocupa el 90% de lo que es la infertilidad, sino que quiero sacar a la luz ese 10% restante, esa pequeña parte positiva que me ha aportado haber pasado 4 años de lucha, sangre, sudor y lágrimas.
Qué aspectos positivos he sacado de la infertilidad?
1.- Desde que iniciamos este duro camino, mi pareja y yo nos fuimos uniendo mucho más. Llega un momento en el que tu vida social desaparece, no te apetece estar con nadie, te encierras en ti mismo, y en ese punto, puedes llegar a tener problemas de pareja, pero en mi caso nos unió mucho más. Éramos él y yo, el resto del mundo desapareció, y ello ha hecho una relación más fuerte.
2.- Por el camino de la infertilidad he conocido personas impresionantes, guerreras, luchadoras, sinceras… y varias de ellas se han convertido en muy buenas amigas. Nos hemos entendido a la perfección y siempre están ahí, para cualquier cosa que nos pase, y eso hoy en día, es difícil de encontrar. A todas ellas, muchas gracias por estar ahí, y solo deseo que sea por muchoooooo tiempo.
3.- He aprendido que hay que vivir la vida en su plenitud y día a día, sin hacer tantos planes y organizar tu futuro, ya que nunca se sabe lo que el destino te tiene preparado, y a veces malgastamos un tiempo precioso en programar algo que quizás nunca suceda. Hoy por hoy, no pienso en mañana, ni en el próximo verano, ni en qué haré de aquí a 10 años. Hoy por hoy disfruto de lo que conseguí, viviendo cada minuto al máximo, intentando ayudar a otras personas a conseguir sus sueños y sintiéndome lo más plena posible. Eso no quiere decir que no tenga mis días malos, negativos y tristes, pero intento saborear el día a día.
4.- De una manera natural se ha hecho un triaje de amistades en mi círculo social. En momentos difíciles te das cuenta de quién merece la pena tener a tu lado, y quién no, y poco a poco, la infertilidad hizo ese triaje por mí, y me acercó más a personas que no esperaba y alejó a otras que no estuvieron a la altura, ni empatizaron ni entendieron por lo que estaba pasando. A todas ellas, gracias por vuestro viaje. Dicen que todas las personas que pasan por tu vida dejan algo de ellas en ti, y es verdad, unas suben y otras bajan del tren de vida, pero todas han aportado algo que me ha servido. Gracias.
5.- Y sobre todo he aprendido que a veces se habla demasiado sin saber, así que he aprendido a callar más, a juzgar menos y a empatizar más con las personas. Hay una frase que me encanta que dice: “quiéreme cuando menos lo merezca, porque será cuando más lo necesite”. A veces, aquella persona que te provoca rechazo, está pidiendo ayuda a gritos, escúchala, yo he aprendido a escuchar más.
LAURA SEGURA
La asociación Red Nacional de Infértiles se creó para dar apoyo a todas las personas que están en estos momentos luchando por tener un bebé. Cuando la palabra infertilidad se cruza en tu vida todo tu mundo se paraliza. Comienza una etapa de stand by en la que se necesita una mano que te sujete, unos brazos que te reconforten.
Además, nuestro objetivo es darle voz a la infertilidad. Que se conozca la enfermedad, lo que es, lo que se vive, lo que se sufre.
Si quieres ayudarnos en nuestra lucha, ¡únete a nosotras y asóciate!